23 de abril de 2008

La cabeza del puma (Sacsayhuamán)

En junio comienza el invierno en Perú. Las temperaturas suelen ser suaves, excepto por la noche en el interior, o en las altas cumbres de los Andes. Es también la época seca. En zonas como Nazca (Nasca en Perú), Ica o el valle del río Urubamba, durante el día se pueden registrar 25 grados centígrados, dándose la paradoja de poder permitirse un chapuzón a pleno sol y tener que sentarse junto a la chimenea al caer la noche, cuando el termómetro marca cero grados.


La llegada del solsticio de invierno está marcada por el Inti Raymi, una ancestral ceremonia inca de culto al sol de la que se ha rescatado una parte, teniendo en cuenta el testimonio dejado por Garcilaso de la Vega. La representación se hace en la llanura de Sacsayhuamán, muy cerca de Cuzco (o Cusco), a los pies de la fortaleza megalítica que asombra por la exacta unión de sus piedras, da igual que sean gigantescos bloques de varias toneladas, como los que marcan las esquinas del peculiar diseño en forma de dientes de sierra que tienen estas murallas, o guijarros. No hay argamasa. Es el puzzle de un cíclope. Es la cabeza de un puma.